Necesito liberar. Necesito sacar todo tipo de pensamientos. De los más
importantes, hasta los más inútiles, pasando por los más irreales. Me siento
perdida dentro de este mundo de seres humanos que se relacionan y dejan de
relacionarse, se enamoran, sienten, lloran y ríen. Quizás sea una locura,
quizás no; pero necesito intentar resolver mi vida, encontrarme a mí misma y
sentirme a gusto en este difícil mundo. Por eso quiero, por eso voy a empezar a
escribir.
Necesito contar las cosas que
pienso, las cosas que siento. Necesito sentirme oída y escuchada, comprendida,
aprehendida. Esto viene de hace ya mucho tiempo, cuando ni mi nombre era mío. Ahora
las cosas han cambiado, ya no soy aquella persona. Sé que no soy mejor
(probablemente nunca fui buena), pero tampoco peor, ni mucho menos igual.
Quiero explicar lo que hago día a día, enseñar mis reflexiones y dejar que los demás vean que no son extraños, que son personas iguales a cualquiera. Quiero explicar mis puntos de vista y escuchar los de los demás. Eso pretendo aquí. Yo no tuve a nadie porque no tenía ojos para ver. Sé que si alguien te ayuda a abrirlos, el camino correcto es mucho más nítido. Esto es lo que he aprendido de aquellos años. Más adelante, si me atrevo, contaré lo que pasó.
Quiero explicar lo que hago día a día, enseñar mis reflexiones y dejar que los demás vean que no son extraños, que son personas iguales a cualquiera. Quiero explicar mis puntos de vista y escuchar los de los demás. Eso pretendo aquí. Yo no tuve a nadie porque no tenía ojos para ver. Sé que si alguien te ayuda a abrirlos, el camino correcto es mucho más nítido. Esto es lo que he aprendido de aquellos años. Más adelante, si me atrevo, contaré lo que pasó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario