"Amor mío, amor mío.

Y la palabra suena en el vacío. Y se está solo".

Vicente Aleixandre.

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lunes, 7 de enero de 2013

Pensamientos de una mañana




Ahí estoy yo. Soy esa que está sentada frente al balcón de su casa. Estoy en una butaca, un sillón de esos orejeros, mirando hacia la luz con los ojos entornados, y pensando en todo lo que viví en el pasado y lo que vivo en el presente. Aunque acabamos de estrenar el invierno hace un día luminoso y el sol me entrega toda su tibieza sobre en el rostro, agradecida recito una especie de oración interior con gesto de placer. Son más de las doce del mediodía, tengo una copa de Rioja en la mano y unos frutos secos sobre una mesita junto a la butaca, no tengo prisa, hoy tengo todo el tiempo del mundo.

Con el sabor intenso del vino en mi boca, pienso con serenidad en mí, en cómo me encuentro ahora, en si estará escrito mi destino en algún tipo de registro, en mis ratos, pocos, como el de ahora, esos momentos en los que soy capaz de parar el mundo que hay a mi alrededor y sosegar mis pensamientos. Pienso también en mi futuro más próximo, pero no como si estuviera revisando mi agenda, sino más bien como forma de procesar lo bueno y malo que en él pudiera haber, una especie de balance previo. De la calle, se cuela el bullicio que hay a estas horas, aunque en realidad está muy lejos de mis pensamientos y apenas percibo un ligero ruido de fondo, monótono y casi mecánico, parecido a una máquina que nunca descansara.


Ahora dejo volar mi mente. Siguiendo el hilo de mis pensamientos me traslado a aquellas mañanas en casa de mis padres, en la que la vista era un hermoso jardín rodeado de árboles que a nosotras nos parecía que trataban de llegar al cielo. Pero sobre todo, recuerdo, unos eucaliptos gigantes que se mecían en el horizonte, acunados por aquel viento siempre presente, yo los miraba y sentía como ellos escuchaban mi silencio. Con la vista fija en el horizonte todo acababa desenfocándose, y los árboles y yo nos hacíamos efímeros y partícipes de una liturgia común. Aquellas mañanas habían sido reveladoras de la certeza del paraíso que se esconde a veces en la soledad. 

También recuerdo algunas noches, que fueron la expresión más sencilla de la felicidad, cuando me tumbaba junto a mi hermana en el jardín a mirar las estrellas y conversar durante horas sobre las constelaciones, sobre los sueños que viajaban por el océano de aquella oscuridad infinita.

De regreso al aquí, sigo frente al balcón con mi copa en la mano, es como una pequeña parada en el ahora para comprobar la realidad antes de que mi mente me devuelva al pasado, al instante en que entré en esta casa por primera vez. No sé los motivos por los que algo o alguien participa de tu destino, en una especie de movimiento del orden matemático, y cómo eso me condujo hasta aquí, cómo en una tarde sin historia, acabé visitando esta casa que en pocos días se convertiría en parte de mi vida. Y es que, aunque desconozco las verdaderas estrategias por las que el devenir me ha colocado en esta suerte, pienso, ilusa de mí, que tal vez me serán desveladas en un futuro cercano.

Este recuerdo tan próximo me hace meditar sobre la nostalgia que parece preñar estas reflexiones, siento cierta melancolía de una pureza cristalina, e imagino un estanque de aguas claras en el que se mecen estos momentos de plenitud mientras yo me sumerjo junto a ellos. De alguna forma, disfruto imaginando que en algún lugar hay algo, un hecho significativo con el poder suficiente para acercarme a mi propio entendimiento.

Por eso, construir historias con recuerdos se ha convertido en uno de mis pasatiempos favoritos, en ellas soy capaz de viajar a mis mundos, y para mí son tan reales que los puedo tocar con la libertad de ser mi propia alquimista. Ahora, desde mi sillón, con los ojos entornados todavía y saboreando el último sorbo de mi copa de vino, me vienen a la memoria unas palabras del poeta romántico John Keats que dejo como epílogo a esta mañana cálida de invierno que he pasado junto a mí misma.

“La belleza es verdad y la verdad belleza… Nada más se sabe en esta tierra y nada más hace falta.”

34 comentarios:

  1. Tener tiempo para uno mismo es uno de los lujos imprescindibles.

    Tiempo en el que se nos cruzan en el pensamiento lo que esperamos (deseamos) que el futuro nos acerqué con aquello que vivimos en el pasado y se pego a nuestra memoria para siempre.

    Un sofá, una copa de vino, un sol que ayuda y nuestra mente dejando volar libre a la imaginación.

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    1. Pasado, presente y futuro se sientan a nuestro lado hasta establecer ese vínculo especial que nos acerca a lo que queremos ser, a quienes queremos tener cerca.

      A mi, como supongo que a casi todo el mundo, nos resulta difícil extraer de nuestro trajín cotidiano el tiempo suficiente y sobre todo necesario para dedicárnoslo, en nuestro bien y en el bien de los que nos rodean.

      Un abrazo.

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  2. Me parece una forma genial de saborear el vino. Solo o en compañía, con tranquilidad y disfrutando del momento y los buenos recuerdos.


    Un saludo.

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    1. Efectivamente, es genial dedicarse un ratito, así sin prisas, a una misma, y es verdad, cada situación tiene su propio "puntito"

      Abrazos

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  3. Ese vino oscilando sorbo a sorbo, al compás del tiempo. Sugerente, compañera. Un abrazo

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    1. Yo por si acaso no lo hago oscilar mucho que con mi pulso... Pero tienes razón es una forma muy sugerente de tomarse un buen vino.

      Abrazos

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  4. Viajes interiores que avivan nuestros recuerdos, momentos para el disfrute propio.
    Un abrazo

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    1. Totalmente. Dejar la mente volar sin control entre recuerdos y futuros reconforta el alma.

      Abrazos

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  5. El placer de escribir y compartir pasados, presentes y futuros predestinados o no, es algo que me emociona. Lo primero que leo en tu blog es una cita de Vicente Aleixandre, mi poeta de cabecera... me encanta.

    besos y ternuras.

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    1. Gracias Antoni por llegar hasta mi casa que desde hoy también es un poquito tuya. Veo que compartimos pasión, los versos de V. Aleixandre, me gusta eso.

      Es mi deseo compartir aquí parte de mi vida pasada, presente y futura, y si todo ello llega a emocionar a alguien, pues qué quieres que te diga...

      Gracias por tus besos y tus ternuras, yo te devuelvo al menos otro tanto.

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  6. Un lujo ser alquimista de tus historias y pensamientos. Es la magia de la escritura

    Me ha gustado

    Gracias por asomarte a mi rincón.

    Un saludo

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    1. Hola Kety, hoy por hoy es de las pocas cosas que puedo permitirme, además elaborar mis historias partiendo de mi propia experiencia, de mis propias vivencias, hace que esta auto-terapia sea más sencilla. Tienes razón escribir es un acto mágico inigualable.

      Besos

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  7. Llego hasta esta, tu casa de la palabra y me encuentro con algo que es el pilar mas importante de mi vida, junto con el amor hacia los mios, y espero a partir de hoy considerarte también un poco cercana. Mi pilar, los recuerdos...me has emocionado niña, que bonito y que bien montado...además tu entrada...Vicente Alexandre...me encanta!!
    Un beso en colores directo al alma....muackkkkkk....FELICIDADES.

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    1. Hola Mariángeles, te quieres creer qué estoy sonrojada? Pasear por mi vida, mis recuerdos, mis ilusiones y mis futuros, a parte de como terapia, como ya he dicho alguna vez, me sirve para no olvidar y acercarme al tiempo y a la vida de otros, de vosotros, con los que es un placer compartir lo que de mis manos y mi cabeza pueda salir. En cuanto a V. Aleixandre qué puedo decirte... para mi es un referente y una inspiración.

      Un beso muy colorido para ti también.

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  8. Sabia manera de paladearel tiempo y los recuerdos.
    Saludos.

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    1. Gracias por visitarme Nómada, sí, es un placer poder de vez en cuando paladear el tiempo y los recuerdos, sobre todo si ayuda a sosegar el alma.

      Un abrazo

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  9. Me gusta tu Blog, esa primera persona que se multiplica en cientos,empatía, simpatía... por todo ello he decidido que eres el blog de la semana en mi espacio...un abrazo

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    1. Hola Anabel. Lo primero agradecerte el regalo de concederme ser el blog de la semana en tu blogoteca, después compartir contigo y con todos tus lectores la misma empatía y simpatía que me llega desde vuestros corazones. Lo dicho, todo un regalo estar con vosotros.

      Un fuerte beso.

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  10. un viaje en el tren de los recuerdos a un tiempo mejor y/o especial quién no lo hace alguna vez y que mejor es cuando se recrea un ambiente especial como el balcón y el vino y el deseo de un mañana mejor muy bien plasmadas en éste espacio tuyo,me ha gustado tu inspiración,espero que las perspectivas que tengas para este 2013 las alcanzes y que la inspiración te siga acompañando y a nosotros nos permita seguir degustando de tu talento.

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    1. Gracias PedRo por tus bonitas palabras, aunque no creo que sea para tanto la cosa. Yo también te deseo lo mejor para este año que acabamos de empezar.
      Me gusta la idea del viaje en tren, tomo nota para futuras entradas. Me gusta detener el tiempo y marcharme a otros momentos de mi vida, sobre todo porque trato de que sean momentos felices o con algún tipo de significado especial, que los momentos malos acuden sin llamar a la puerta y sin ser invitados más veces de los que me gustaría.

      Un abrazo y gracias de nuevo.

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  11. Entonces hay que entrenar a la mente,ejercitarla de tal modo que se acostumbre como si de un filtro se tratase,que pueda identificar los malos recuerdos y no les permita el ingreso,tienes el don de escribir y las herramientas necesarias para ello.Es una buena manera de ahuyentar aquellos fantasmas,recuerda esto : "Nada vá a estar en tu mente más del tiempo que tú le permitas quedarse".

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    1. En ello ando, PedRo. Pese a todo es inevitable que alguno se salte el filtro, lo que hago es aprovecharlo para sacar el máximo beneficio como experiencia o aprendizaje, y a veces también es una buena escusa para un buen texto. En tiempos de crisis ni de las malas cosas nos podemos permitir no sacar algo bueno. Todo tiene su "aquel".

      Gracias de nuevo por tu compañía en esta noche de insomnio.

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  12. buena es aquella actitúd que nos empuja a sacar lo mejor de las cosas,sigue asi,gracias por tomar parte de tu tiempo para responder a mis mensajes,es un gusto detenerse a descansar entre tus letras,espero que esta noche si puedas conciliar el sueño y si no es asi vá a ser un gusto volver a acompañarte en tu espacio.

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    1. Creo que es lo mínimo que puedo y debo hacer por quien se toma interés en lo que hago, en estos momentos sin vosotros este espacio no tendría sentido. En cuanto a mi insomnio, tranquilo, ya es como de la familia, el día que no aparece casi lo extraño.

      Un fuerte abrazo.

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  13. Me gusta tu relato, la forma de describirlo, he visitado tu blog y me quedo por aqui para disfrutar del mismo, es una forma de expresar, hay que saber plasmarlo así como lo haces.
    Enhorabuena.
    Feliz Año.
    Saludos.

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    1. Gracias José Antonio. Cuando hace unos pocos meses empecé a compartir lo que escribía con todos vosotros, nunca pensé que resultaría tan gratificante, tanto por todo vuestro cariño para conmigo como por la respuesta conseguida en forma de complicidad. Así que mil gracias por llegar hasta aquí y quedarte.

      Un abrazo.

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  14. Un paseo sosegado a través de los recuerdos,reflexionando sobre una misma. Este ejercicio mental suele dar buenos frutos.
    Un abrazo.

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    1. Todo un paseo, sin duda, pero como tú bien dices, es la mejor manera de conocerse una misma, y al final es lo que nos sirve y nos salva.

      Gracias por tu compañía Ohma, un abrazo.

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  15. Tienes buenos articulos, Felicitaciones por tu Blog, Visita tambien el mio, comenta, suscribete y sigueme, que yo tambien hare lo mismo, gracias.

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    1. Gracias por tus palabras y tu visita, te seguiré.

      Un abrazo.

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  16. Hola,solo un momento para desearte un buen fin de semana,cuidate.

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    1. Gracias Pedro, te deseo lo mismo desde esta mañana norteña desapacible y ventosa.

      Un abrazo.

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  17. Gracias Soledad por llegar hasta mi blog y dejar tu huella, así he podido yo llegar hasta el tuyo que es magnífico.
    He leído tu entrada y a cada sorbo de tu vino he vivído sin vivir tu experiencia y tus recuerdos.

    Un abrazo grande,
    Eva.

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    1. Un placer Eva, puedes pasar y ver todo lo que quieras, estás en tu casa.

      Un abrazo

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